La verdad es que no sé cómo empezar...
Vuelven a haber cambios en mi vida profesional, y todos ellos sin abandonar la organización para la cual presto servicios.
Después del post del contacto con el poder ejecutivo, la vida sigue, y van pasando cosas.
Unas mejores, otras peores, pero el caso es que desde el jueves de la semana pasada (más o menos a las 11 de la mañana) mi vida profesional cambia...
Los nubarrones y malos presagios se deshacen como por ensalmo y paso a vivir lo que podría calificar como "cuento de hadas profesional".
Sigo en la misma organización, en otro departamento, en el mismo sector (el nuestro), aunque retirado parcialmente de lo que podríamos llamar "primera línea".
Sólo espero no convertirme en un iluminado...
P.D. Hay alguien que creo que es lectora de este blog a quien debo como mínimo un par de cervezas bien frías. Cuando quieras, ya lo sabes, te las has ganado con creces.