Anticipación.

Descripción del sistema.
www.extremetech.com

























En la vida de este blog ha habido entradas que han levantado polvareda por su contenido, pero las que más han sido las de anticipación; cabe recordar, por poner un ejemplo, la dedicada a mi participación en el PodCamp BCN de 2010, en el que dibujaba un futuro de mentes conectadas, la exoexistencia y la aparición del Homo Superior, cuya argumentación estaba basada en la existencia de un proyecto DARPA sobre telepatía asistida.

Cabe decir que algunas de las tecnologías que describí se están desarrollando ya en estos momentos en laboratorios situados en USA y Japón, como ya ponía de manifiesto en el Síndrome de Hong Kong.

En cuanto al speech, podéis escucharlo y seguir la presentación aquí; decir que meses más tarde escribí  otro post, 2050: regreso al futuro, en el que desarrollaba mi visión que ofrecí en el PodCamp -de aquí a unas décadas- de cómo veía el futuro, y en el que, entre otras cosas, decía lo siguiente:

"El modelo de negocio de los laboratorios farmacéuticos ha cambiado: se ha pasado de la producción masiva de fármacos a la existencia en base regional de "fabricadores", fábricas de fármacos con características de fusión nuclear, que no pertenecen a ninguna compañía concreta, y que fabrican la especialidad en base "just in time", por prescripción. Estas fábricas disponen de unos elementos básicos (carbono, potasio, silicio, oxígeno) y fabrican las diferentes moléculas por aproximación "fuerza bruta": transforman la materia y crean los materiales necesarios a demanda; la energía que necesitan para efectuar tal operación es ingente, pero disponen de una fuente inagotable de energía: fusión nuclear."

Lo que quise decir es que el laboratorio ya no fabricará principios activos, sino que tan sólo se encargará del I+D del diseño de la molécula, y es de estos diseños de donde el "fabricador" adquiere la formulación para fabricarla.

El caso es que hoy, leyendo ExtremeTech, veo que el concepto ya está siendo desarrollado pero desde un punto de vista tecnológicamente diferente: usando impresión 3D, nanotecnología y estructuras de ADN, se imprimen molécula a molécula fármacos contra el cáncer; aunque en el artículo ya avisan que NO es exactamente una impresión 3D, sí que es un punto de partida para construir el "fabricador" que describía párrafos atrás.

La industria farmacéutica debería seguir muy de cerca estos avances.