Magia.

En el PodCampBCN en el que intervine, tras de mí habló Olga Fernández, que impulsa una iniciativa, e-Criterium, que debiera ser seguida con el máximo interés.

Olga nos explicó una anécdota, sobre una carta, recibida en un servicio de Ginecología y Obstetrícia, que según sus palabras, cambió el servicio para siempre.

Cito en cursiva el contenido de la carta tal como la recuerdo de la narración de Olga:

He sido tratada correctamente... enfermeras, médicos, celadores, todos han sido muy correctos conmigo... y todo ha ido bien, los dos estamos bien. Sólo hay una cosa: en ningún momento, cuando han tratado conmigo, nadie me ha mirado a los ojos... nadie.

En el transcurso de estos días, con motivo de la puesta en marcha de i2HealthSantPau, he estado hablando con muchas personas, de la industria, de asociaciones de pacientes, y al hablar de mejoras en la relación entre clínicos y pacientes, todos tienen alguna historia parecida para explicar.

Por tanto, parece que hay recorrido, parece que es posible avanzar en este aspecto: y no es una inquietud sólo mía, "en el otro lado de la mesa" encontramos posts estupendos de Julio Bonis, Salvador Casado, María José Alonso o la Dra. Cole que ahondan en este tema desde su perspectiva como profesionales...

Os voy a hacer una reflexión que puede parecer impropia de un tecnólogo como yo...

No existe ninguna tecnología actual que pueda suplir la calidez de un abrazo, el afecto de una caricia, el fulgor de una mirada... cosas que también un paciente, "el que padece", también necesita para su tratamiento.

Estos gestos pueden ser considerados magia, magia de la buena.