El paradigma de las formaciones.

Hasta ahora, había tocado diferentes temas relacionados con tecnología, eHealth, mHealth, incluso de métodos de presentación... pero nunca había hablado de la formación.

Es curioso decir que esta mañana, en el tren, he estado hablando con un amigo mío, CIO de un hospital comarcal, de temas de formación, y esta misma mañana, vía LinkedIn, leo este interesante post, de una persona que tiene la virtud de hacerme reflexionar...

La formación es uno de los aspectos más importantes que podamos tener, no tan sólo en nuestro entorno, sino también en cualquier entorno que se precie, ya sea laboral o personal... es una vía hacia el crecimiento y la plenitud de la persona y una herramienta importantísima para el mejor desempeño de la organización.

En general, en los centros sanitarios, suelen haber espacios destinados a estos menesteres, y habitualmente están dotados de unos cuantos PC, con red, proyector y pantalla.

El tema es que, si bien, desde un punto de vista de dotación pudiera parecer suficiente, hay varios aspectos fundamentales que deberían tenerse en cuenta para el máximo aprovechamiento de la formación...

El primero y más importante de todos, el formador... no tan sólo debe tener el grado adecuado de formación para poder impartir el curso sino que además un elevado grado de empatía y cercanía con las personas a formar... y recordad, en formación presencial, la actitud del formador marca la diferencia.

La actitud del formador: es muy importante, pues no es lo mismo un formador que se limite a repetir un discurso estructurado y rígido a partir de las necesidades de formación, un formador 1.0 por así decirlo, que un formador que en vez de enseñar, guíe y acompañe a quienes asisten a la formación... debe poder contagiar entusiasmo, debe poder contagiar pasión, debe conocer perfectamente el ámbito en el que desarrollan su actividad los asistentes, para así poder ser flexible y descubrir conjuntamente con ellos... una actitud claramente 2.0.

Otro aspecto a resaltar es el material, debe ser claro y conciso, a poder ser interactivo... nada más frustrante que descubrir que el material didáctico es un documento o una presentación estáticos... vale la pena usar herramientas como Moodle, una herramienta de gestión de eLearning, en la cual se pueden preparar cursos y ejercicios, entre muchas otras cosas y que incluso permite la formación no presencial, unido a herramientas como CamStudio, que permite capturar en forma de clip de vídeo todo aquello que suceda en una pantalla de un PC, o bien preparar maquetas, o bien tener a disposición entornos de formación lo más cercanos a la realidad diaria... así pues, se pueden preparar ejemplos prácticos de uso de funcionalidades concretas de un sistema de información.

El concepto lapso de atención es importante... hay que mantener el interés, y para hacerlo no hay que abusar de sesiones maratonianas de formación en las que, por la tarde, fácilmente veríamos usuarios reprimiendo bostezos... Claro, conciso, seguro... provocar interés.

Muy importante es el capítulo de inquietudes y preguntas: siempre hay un porqué para todo, sin excepción... y siempre debemos responder. Evidentemente que habrá excepciones, pues habrá veces que las preguntas tengan poco o nada que ver con la formación; éstas quedarán sin respuesta.

Ya puestos, es muy importante, y más en centros sanitarios, donde no tan sólo son depositarios de conocimiento sino que además son generadores de conocimiento, el vertebrar el dónde debe residir para su mejor difusión...

El conocimiento generado suele ser fruto de equipos de trabajo multidisciplinares, por tanto se tienen que preparar entornos de trabajo colaborativo y gestión del conocimiento, como por ejemplo Confluence o el ya conocido Google Wave...

Sea como fuere, el uso de los entornos de gestión de conocimiento es el germen de nuevas formaciones sobre el conocimiento allí acumulado...

Y como ya sabéis, el conocimiento reside en la organización.