En estos días de verano (y antes) uno de los temas estrella que cada vez (y con más fuerza) nos interesa y nos afecta, es la actual crisis económica.
Para quien vaya leyendo prensa diaria (y destacados bloggers), raro es el día en que no nos veamos golpeados por noticias con una orientación ciertamente negativa.
Los blogs:
- Marc Vidal, desde una perspectiva más técnica, da una visión mas bien sombría, aunque no por ello menos real de lo que nos puede pasar a algunos al volver de vacaciones...el resto de los posts de este blog son sumamente instructivos y de lectura recomendada.
- Antonio Tello, con su verbo siempre apasionado, nos ofrece otra visión del mismo tema.
- Este post del blog de Vitápolis, da algunas claves personales de lo que está sucediendo...
Hay muchos más blogs que ahondan en este problema...
Mi opinión sobre las causas es un poco diferente a la que ellos y otros muchos apuntan, y tiene que ver con un cambio de mentalidad que también tiene que ver con un cambio generacional... hemos pasado de una cultura y forma de trabajar en la que se primaba el esfuerzo y el ahorro por otra en la que todo, debidamente financiado, estaba al alcance de todo el mundo, con poco o muy poco esfuerzo...
En la prensa diaria, encontramos noticias preocupantes, similares a ésta, que hace que no nos llegue la camisa al cuello...
¿Y a nosotros? ¿En qué nos afecta?
Hay quien dice (yo entre ellos) que estamos en un sector en el que hay que mantener un mínimo de inversión porque, en general, el ciudadano medio puede tolerar el que se retrase, por ejemplo, la construcción de una carretera pero dificilmente tolerará el no ser atendido en un centro sanitario...
Ahora bien, en esta situación económica que atravesamos, en la que multitud de actores (incluso diría de primeras figuras) están de acuerdo en que es una crisis de larga o muy larga duración, ¿qué nos podemos encontrar?
En los servicios autonómicos de salud, los fondos salen de aportaciones procedentes en su gran mayoría de aportaciones de la Tesorería de la Seguridad Social, y de impuestos estatales y autonómicos.
No soy un experto en economía, pero creo que si hay un retroceso en cuanto a trabajadores que cotizan a la Seguridad Social, por fuerza, más tarde o más temprano, se resentirán la arcas del Estado de la disminución de ingresos.
No soy un experto en economía, pero creo que si hay un retroceso en cuanto a trabajadores que cotizan a la Seguridad Social, por fuerza, más tarde o más temprano, se resentirán la arcas del Estado de la disminución de ingresos.
Por tanto, los servicios públicos, tanto estatales como autonómicos, creo que se van a resentir, en mayor o menor medida por efecto de la crisis.
Mi opinión:
- no habrá un retroceso, pero tampoco un aumento de la inversión en tecnología sanitaria directamente aplicable al ciudadano paciente.
- dentro del punto anterior entiendo que en los HIS "sin papeles" se mantendrán los parámetros de inversión.
- los concursos ya adjudicados también se mantendrán puesto que ya existe la reserva de fondos para ejecutar los proyectos.
- En todas aquellas organizaciones en las que los sistemas de información sean meramente administrativos y no haya salido a concurso su actualización o cambio, difícilmente saldrá el concurso.
- para los profesionales que estén "en el lado" del cliente, pocas o muy pocas consecuencias, sólo que se va a acentuar el mantenimiento de equipos y sistemas en detrimento de renovación o sustitución.
- para los profesionales "consultores" en el lado del proveedor, las consecuencias, en algunos casos, esperemos que pocos, pueden ser dramáticas.